Cómo limpiar y desinfectar tu baño a fondo de forma rápida

El baño es uno de los sitios de mayor relajación de la casa, puede representar el momento de darse un baño de agua caliente después de llegar del trabajo. Sin embargo, también lo utilizamos a diario como un sitio al cual entramos y salimos constantemente. El cuarto de baño es uno de los sitios que más bacterias acumula en el hogar, por eso es importante mantenerlo limpio.

Este cuarto es propenso a coger humedad y sarro proveniente de los jabones, el champú, el acondicionador y otros productos oleosos que se utilizan en la rutina de higiene personal. Esta combinación puede fomentar la reproducción de bacterias indeseables y dañinas, tanto para los materiales del baño como para nosotros.

Primeros pasos: preparación del material
• Detalles que no puedes pasar por alto
• Consejos y trucos
• Ahora sí, ¡A limpiar!

Como comentábamos, el cuarto de baño es un sitio de relajación, soledad y paz para muchos. Mantenerlo limpio y ordenado aporta calma y comodidad a la hora de relajarse y tomar un baño. El cuarto de baño no siempre es un espacio grande y es importante mantenerlo ordenado para no reducirlo aún más. Además, la organización facilita la limpieza.

Al menos una vez por semana deberíamos desinfectar el lavabo, el inodoro y las cortinas de ducha, las bañeras o platos de ducha. Para las mamparas podemos tomarnos una licencia y limpiarlas bien una vez cada dos semanas. Puedes dedicar un día a la semana para hacer todo este trabajo junto o ir haciéndolo poco a poco.

Aquí te daremos algunos consejos para limpiar adecuadamente el baño y tenerlo siempre en perfectas condiciones.

Primeros pasos: preparación del material

Preparar y tener al alcance de la mano los materiales y herramientas que vamos a utilizar para limpiar el cuarto de baño es muy importante. Dentro de las herramientas básicas para realizar esta tarea se encuentran las escobillas, recogedores y pulverizadores.

Las escobillas, con su respectivo escobillero, sirven para poder limpiar profundamente el interior del inodoro y el bidé. Con estas escobillas podrás quitar el sarro y las manchas de agua que se forman alrededor del interior de la taza del inodoro. Son muy útiles gracias a su resistencia, la dureza de las cerdas y el mango largo.

Los recogedores vienen en distintos formatos, utiliza el que mejor se adecúe a tus necesidades. Para elegir bien una escobilla y recogedor, debes evaluar si el suelo del baño es liso o no, si tienes muchos rincones y si es grande o pequeño. De esta forma, comprar el recogedor de basura correcto será más sencillo.

Por último, los vaporizadores son de vital importancia para desinfectar distintas zonas. Procura tener más de uno para poder llenarlos de productos de limpieza de baño particulares según el material a limpiar. Por ejemplo, ten uno con líquido limpiacristales para espejos y ventanas, otro con líquido para quitar el sarro en metales y cerámicas, y otro para limpiar mamparas (si es que tienes).

Detalles que no puedes pasar por alto

Recuerda repasar todos los rincones del baño para evitar la proliferación de bacterias. Con un cepillo y recogedor puedes limpiar el polvo de la superficie de los rincones fácilmente. Después de quitar el polvo de todas las superficies, rocía líquido limpiador con un pulverizador Canyon para desinfectar y quitar las manchas más resistentes.

Es recomendable colocar el escobillero cerca del inodoro y dejarlo allí, por eso puedes optar por un escobillero negro sofisticado que no perjudique la estética de tu cuarto de baño. De esta forma podrás mantener la limpieza de la taza de baño por más tiempo y evitar manchas difíciles de quitar.

Mantener el baño limpio trae serenidad y relajación. Siempre evita contener demasiado vapor, ya que éste puede deteriorar las paredes y generar crecimiento de hongos que son difíciles de quitar. Procura tener ventilación para evitar esto y contar con los instrumentos de limpieza necesarios para eliminar las bacterias de esta estancia. Si tienes azulejos, también debes limpiarlos una vez por semana.

Consejos y trucos

Comienza por los sectores dispuestos a una mayor altura y termina con el suelo. De esta forma, la suciedad y polvo que puedas quitar de aquello que esté en altura, no volverá a ensuciar lo que ya limpiaste.

Utiliza un pulverizador profesional resistente y con mayor proyección y capacidad para no tener que estar llenando el bote cada vez que limpies el baño.

Puedes dejar vaporizadores en un mueble cerrado dentro del cuarto de baño para tener a mano.

Utiliza escoba y recogedor antes de pasar un paño húmedo de limpieza para quitar pelos, polvo y pelusas.

Utiliza productos de limpieza profesionales según el uso que debas darle, no todos los materiales necesitan el mismo tratamiento y utilizar productos de limpieza equivocados puede que no quite la suciedad o que resulten muy abrasivos.

No utilices el mismo paño para todo el baño, procura tener uno especial para el inodoro y bidet, otro para la ducha, otro para muebles y uno más para el lavamanos.

El papel de periódico es el mejor aliado de los cristales y espejos. Tras limpiar bien los espejos con limpiacristales, puedes rociar un poco de alcohol y pasar un papel de periódico para quitar posibles restos del limpiacristales y darle un brillo único.

Ahora sí, ¡A limpiar!

Si aún no tienes todos estos elementos básicos de limpieza, puedes elegir los que necesites en el apartado de "útiles de limpieza". Observa todas las alternativas y elige los artículos que más se adecúen a tus necesidades. Recuerda limpiar el baño completo al menos una vez por semana.